Pendejos modernos.

Nadie pudo haber advertido que en estos tiempos modernos que estamos viviendo, conviviendo con gentes que al mismo tiempo son tan conscientes como incongruentes, íbamos a disfrutar tanto sus episodios de trance e inspiración cuando lo que dicen es contrario a lo que hacen y viceversa, y además lo exhiben.

Entre la variedad de personajes pro gobierno tenemos a entusiastas de diferentes disciplinas, todos muy simpáticos, todos expertos y sobre todo muy tolerantes a la critica y las ideas distintas.

Un ejemplos de los más cotorros son los amlo-ecologistas que han construido toda una narrativa para justificar las medidas de López Obrador contra las energías limpias, el pretexto clásico de "combatir la corrupción" ahora también los ha llevado a cuestionar "si las energías limpias convienen o no". 

 

Aquí vuelvo a una de mis máximas teorías de que "La 4T se trata de lo que yo quiera" un fenómeno que por increíble que parezca sigue vigente y hay gentes que siguen esperando que en algún momento AMLO haga lo que es ellos esperan aunque ya haya hecho exactamente lo contrario, así sea en este sexenio o en el siguiente.

 

Si López Obrador se proponía encabezar una transformación y la "moralización" de la vida pública del país... bien podría haberse rodeado de gentes capaces, preparadas, honorables y sin pasados obscuros con escándalos de corrupción  como lo hizo, desde ahí todo lo que puedan decir  para defender y justificar al gobierno es inútil, cuando varios de sus más cercanos gozan de impunidad por sus acciones en otros puestos.

 

Es increíble que jóvenes y no tan jóvenes, que se precian de ser inteligentes apoyen a un gobierno que puso a Manuel Bartlett al frente de la CFE.

Muchos de los personajes más visibles de la 4T tiene décadas viviendo del erario, encontraron la forma perfecta de darle continuidad a su forma de vida una vez que agotaron y exprimieron a los partidos políticos donde participaron antes.

En los spots de morena de las campañas electorales 2021 aseguran que "el movimiento es del pueblo", una ingeniosa estrategia para afirmar sin decirlo que el movimiento es de AMLO porque en otras oportunidades han dado a entender que el pueblo siempre quiere lo que AMLO quiere y no al revés, y a veces se han atreviso a asegurar que AMLO es el pueblo personificado.

Como si nos faltaran los pendejos.