Resulta ser que contrario a todo lo que alguien razonable pudiera pensar de que el Rock como negocio no existe en mi ciudad por la nula inversión, porque solo hay un concierto de rock "grande" una vez al año, solo hay un bar de rock y porque hay grupos muy buenos pero que no se toman en serio para convertirse en profesionales... no, nada de eso. El problema es que:
"En Culiacán no hay suficientes personas que les guste el rock que permitan a una banda vivir de tocar".
La vida ofrece este tipo de satisfacciones de cuando en cuando para traer alegría a los corazones que disfrutamos del ingenio de las pendejadas que dicen otros, la vida es así.
Hoy se cuentan con una mano las bandas mexicanas que pueden vivir solamente de tocar. Muchas de ellas tomaron la acertada decisión de convertirse en una empresa que generan dinero no solo cuando los músicos se suben al escenario. Todas esas bandas tienen en común trayectorias de más de 15-20 años.
Las bandas que hoy son emergentes la tienen mucho más difícil. Sin los aparatos promocionales de antes será difícil que logren consolidarse. Lo mejor que les puede pasar es colocar un sencillo en el gusto de la gente, sonar un par de meses, sacar algo de las reproducciones de spotify y que la gente se acuerde de ellos cuando saquen otro sencillo. Para consolidarse tendrán que repetir 5 o más veces este proceso.
La próxima gran banda mexicana me atrevo a asegurar, será una banda "no joven ni novata" que ya tengan una discografía de 2 o 3 discos disponible y que con una canción logren llamar la atención del gran público que además de "devorarse el sencillo" podrá conocer el trabajo previo de la banda.
Fin por ahora.
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